Miguel Gracia renuncia a su escaño en las Cortes y volverá a presidir la Diputación

Miguel Gracia, presidente de la Diputación Provincial de Huesca, ha renunciado a su escaño en las Cortes de Aragón y no tomará posesión como diputado autonómico, cargo para el que fue elegido el pasado 26 de mayo.

Figuraba en el número tres de la lista del PSOE por la provincia (por detrás de Fernando Sabés y Olvido Moratinos), una candidatura que obtuvo siete escaños. Ahora el puesto que queda vacante lo ocupará Carmen Sahún, alcaldesa de Estadilla, la número ocho.

De esta forma, el PSOE de Huesca deja toda la responsabilidad de su grupo de diputados en manos de Fernando Sabés, que será la voz de la Federación Altoaragonesa en Zaragoza. Gracia se centrará en la política provincial para volver a presidir la Diputación de Huesca, institución que encabeza desde 2015, cuando tomó el relevo a Antonio Cosculluela, donde en los últimos cuatro años ha trabajado con dos líneas muy claras: luchar contra la despoblación y prestar ayuda a los ayuntamientos, con planes para cubrir sus problemas de financiación. Ha conseguido sacar adelante el proyecto para extender la banda ancha y ha afrontado el difícil reto de crear un servicio provincial de bomberos, que en este nuevo mandato deberá desarrollar.

Hace unos días, en el último pleno ordinario de la institución provincial, no desveló la incógnita sobre si iba a seguir en el cargo o a decantarse por el trabajo en las Cortes de Aragón. Ambos puestos son compatibles, según la ley, pero ha preferido no compaginarlos. 

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Gracia será investido el sábado como alcalde de Arén, con el apoyo de sus siete concejales, todos del PSOE, único partido que presentó candidatura. Después del domingo, se iniciará el proceso para la constitución de la Diputación, donde el PSOE incrementó de 12 a 13 su número